Las várices son uno de los problemas estéticos que más afectan a la mujer en su edad adulta. Se producen cuando las venas se dilatan y dificultan el retorno de la sangre hacia el corazón.
Lo normal es que las válvulas impulsen el flujo sanguíneo desde las piernas hacia el músculo cardíaco; sin embargo, estas pueden presentar alguna alteración y, como consecuencia, se forman las varicosas.
Esto puede ser el resultado de la práctica constante de malos hábitos como el sedentarismo y el consumo de tabaco, pero también se dan por cuestiones genéticas, embarazo y desequilibrios hormonales.
En un principio aparecen de forma leve con las populares “arañitas” y, poco a poco, se van agravando hasta formar una vena que sobresale en las piernas.
Para muchas es primordial darles un tratamiento eficaz ya que, además de lucir mal, pueden ocasionar inflamación y dolor.
Por fortuna, hoy en día hay muchos remedios para disminuirlas de forma notable, y lo mejor es que no hace falta invertir grandes sumas de dinero en ellos.
De hecho, con ingredientes de origen natural podemos elaborar soluciones alternativas muy eficaces y económicas.
En esta ocasión queremos compartir una crema casera de aloe vera, zanahoria y vinagre de manzana que ha dado resultados positivos con este fin. ¡Pruébala!
¿Cuáles son los beneficios de este tratamiento natural para las várices?
El tratamiento natural de aloe vera, zanahoria y vinagre de manzana actúa como complemento para desinflamar y atenuar las várices.
Es un producto que se aplica de forma externa, el cual puede emplearse todos los días para estimular la circulación y reducir el dolor.
El gel de aloe vera, uno de sus compuestos principales, es muy conocido en la industria cosmética por su riqueza nutricional y poder hidratante.
Cuenta con una acción antiinflamatoria y vasodilatadora que disminuye el tamaño de las venas afectadas para impulsar el adecuado flujo sanguíneo.
También proporciona una cantidad significativa de antioxidantes y agua que facilita su aplicación sin hacerle daño a la piel.
Por otro lado, la zanahoria se caracteriza por ser una fuente de beta-carotenos, un antioxidante que previene el envejecimiento prematuro y las manchas.
Sus aportes de vitaminas del complejo B, minerales y fibra la convierten en una de las hortalizas más completas y saludables que se pueden incorporar en la dieta.
Por la consistencia que adquiere cuando se cuece o se licua, es muy fácil aplicarla como crema corporal para aprovechar sus beneficios tópicos.
Muchos de sus compuestos activos se utilizan como parte de los tratamientos reafirmantes, ya que mejoran la elasticidad de la piel y evitan la flacidez.
Además, es un gran complemento para mejorar el estado de las varicosas porque estimula el flujo sanguíneo y desinflama.
Por último nos encontramos con el prodigioso vinagre de manzana, un alimento nutritivo, tonificante y con poderosos compuestos antiinflamatorios que resultan bastante buenos en este tratamiento.
¿Cómo preparar este tratamiento de aloe vera, zanahoria y vinagre de manzana?
La combinación de estos tres ingredientes en un mismo tratamiento es bastante simple y no toma demasiado tiempo.
Sin embargo, antes de llevar a cabo su aplicación, se debe tener en cuenta que se trata de un producto complementario que no da resultados por sí solo.
Aunque su uso constante mejora la circulación y el estado de las venas, se debeapoyar con una buena alimentación y ejercicio regular para lograr los efectos deseados.
Ingredientes
- 1 zanahoria grandes
- 2 hojas de aloe vera
- 3 cucharadas de vinagre de manzana (30 ml)
Preparación
- Pela la zanahoria, córtala en pequeños trozos y cuécela en un cazo con agua hasta que ablande.
- Cuando esté lista, tritúrala con un tenedor hasta obtener una pasta.
- Abre las hojas de aloe vera con un cuchillo y extrae el gel que contiene en su interior.
- Mézclalo con la zanahoria y añade el vinagre de manzana.
- Una vez obtengas una pasta cremosa, procede a aplicar el remedio.
Modo de uso
- Exfolia las piernas antes de aplicar la crema para que el producto se absorba bien.
- Luego, esparce la crema sobre las várices y haz suaves masajes, desde los tobillos hacia las pantorrillas.
- Déjala actuar de 30 a 40 minutos y enjuaga con agua fría.
- Repite la aplicación todos los días, siguiendo los mismos pasos.
Como puedes notar, no hace falta que inviertas en costosos tratamientos comerciales para hacerle frente a este problema.
Si atiendes a los consejos dados y usas de forma continua este producto notarás las mejoras en poco tiempo.